Día del Dumpling: la tradición asiática que conquistó al mundo
Parte del encanto del dumpling, que es originario de Asia, es su capacidad de adaptarse: puede rellenarse con carne, vegetales, mariscos o preparaciones dulces, y pueden encontrase en opciones veganas y sin gluten.
Cada 26 de septiembre se celebra el Día del Dumpling, una fecha dedicada a uno de los bocados más versátiles y queridos de la gastronomía mundial.
Originarios de Asia, los dumplings han trascendido fronteras y hoy se disfrutan en los cinco continentes, con adaptaciones que reflejan la cultura y el paladar de cada lugar.
Su historia se remonta a más de 1.800 años, cuando se preparaban como un alimento energético y accesible durante los fríos inviernos. Con el tiempo, se transformaron en un plato emblemático de celebraciones, especialmente del Año Nuevo Lunar, pues su forma recuerda a las antiguas monedas chinas, símbolo de prosperidad.
Un bocado con muchas caras
Si bien el dumpling chino es el más difundido, el mundo ha hecho suyas estas pequeñas delicias.
En Japón, por ejemplo, los gyoza destacan por su cocción mixta (primero dorados en sartén y luego al vapor) y un relleno ligero de cerdo y repollo.
En Corea, los mandu suelen servirse en sopas calientes, ideales para el invierno.
En Nepal y Tíbet, los momos son una versión especiada, generalmente, acompañados de salsas picantes.
Incluso en Europa del Este existen variantes como los pierogi polacos o los vareniki ucranianos, que muestran cómo esta técnica de envolver rellenos en masa se repite en distintas culturas.
Dumplings para todos los gustos
Parte del encanto del dumpling es su capacidad de adaptarse: puede rellenarse con carne, vegetales, mariscos o preparaciones dulces.
Hoy, además, existen opciones veganas y sin gluten, lo que amplía aún más su alcance, por, lo que restaurantes de todo el mundo celebran esta fecha con menús especiales y promociones.
Y no faltan quienes se animan a prepararlos en casa, convirtiendo la cocina en un espacio de encuentro y creatividad.
¿Dónde comer dumplings en Chile?
En Santiago, uno de los lugares imperdibles para celebrar esta fecha es Dumpling Factory, en Providencia, un espacio que se ha ganado fama por su especialidad en dumplings con variados rellenos: desde los tradicionales de cerdo o camarón, hasta opciones vegetarianas y veganas.
En Santiago también vale visitar Mama Chau’s, reconocido por su propuesta de cocina callejera china con un estilo fresco y urbano, donde los dumplings se han convertido en uno de los platos más solicitados. Y otra alternativa, entre muchas, es Mr. Dumpling, que ofrece una amplia variedad de preparaciones al vapor y fritas, con rellenos clásicos y otros más innovadores, ideal para quienes buscan probar distintas versiones en un solo lugar.
Fuera de la capital, en Valparaíso destaca Casa Dumplings, un acogedor local en cerro Bellavista, donde ofrecen distintas versiones al vapor, rellenas de pollo, cerdo, camarón o setas.
También en la ciudad puerto se encuentra Dragón Chino, un sitio con tradición que además de dumplings sirve platos clásicos de la gastronomía china, ideal para quienes buscan un ambiente más informal.
Otra alternativa es Mio Dim Sum, en Concepción, donde además de dumplings se pueden encontrar baos, sopas, robatayaki y platos que evocan la auténtica cocina callejera asiática.
Y para quienes prefieren celebrar en casa, existe la opción de comprar y preparar sus propios dumplings. Alimentos Shen, en Santiago, ofrece gyozas congeladas con diferentes rellenos, fáciles de cocinar al vapor o a la sartén. Una alternativa práctica para compartir en familia o con amigos, manteniendo viva la tradición de preparar y disfrutar juntos esta delicia asiática.
Más que un plato, un símbolo
El dumpling es más que un alimento: es un símbolo de unión y abundancia. Prepararlo suele ser una actividad comunitaria, donde familiares y amigos se reúnen alrededor de la mesa para armar y cocinar juntos.
Este 26 de septiembre, el Día del Dumpling invita a redescubrir la riqueza de este plato, probar nuevas versiones y, sobre todo, compartirlo. Porque como dicen en muchas culturas: nada une más que una mesa repleta de pequeños tesoros envueltos en masa.