Agua, la otra crisis: ¿Cuáles son las 104 comunas en escasez hídrica?

La crisis del agua marcó un nuevo hito en Chile. En un hecho inédito, 26 de las 30 comunas de la Región de Los Lagos fueron declaradas en estado de escasez hídrica por el Ministerio de Obras Públicas. Desde la semana recién pasada, y por los próximos seis meses, las provincias de Osorno, Llanquihue y Chiloé se mantendrán bajo esta condición.

El único antecedente similar se remonta a 2017 cuando las comunas de Quemchi y Quellón (Chiloé) estuvieron durante cinco meses regidas por este decreto. Ahora, salvo la provincia de Palena, abarca todo el resto de Los Lagos.

Así ya son 104 las comunas del país (de 346) que se encuentran bajo decretos de escasez hídrica en las regiones de Atacama, Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana y Los Lagos.

• Región de Atacama (3)
  • Provincia Copiapó: Copiapó, Caldera y Tierra Amarilla.
• Región de Coquimbo (15)
  
  • Provincia Elqui: Andacollo, Coquimbo, La Higuera, La Serena, Paihuano y Vicuña.
  • Provincia Limarí: Combarbalá, Monte Patria, Ovalle, Punitaqui y Río Hurtado.
    
  • Provincia Choapa: Canela, Illapel, Los Vilos y Salamanca.
    
• Región de Valparaíso (37)
  
  • Provincia Petorca: Petorca, La Ligua, Cabildo, Papudo y Zapallar.
  • Provincia Valparaíso: Casablanca, Concón, Juan Fernández, Puchuncaví, Quintero, Valparaíso y Viña del Mar.
    
  • Provincia San Antonio: Algarrobo, Cartagena, El Quisco, El Tabo, San Antonio y Santo Domingo.
  • Provincia San Felipe: Putaendo, Santa María, Catemu, Panquehue, San Felipe, Llay-Llay.
    
  • Provincia Quillota: Hijuelas, La Calera, La Cruz, Nogales y Quillota.
  • Provincia Los Andes: San Esteban, Los Andes, Rinconada y Calle Larga.
  • Provincia Marga-Marga: Quilpué, Limache, Olmué y Villa Alemana.
• Región Metropolitana (23)
  • Provincia Santiago: Lo Barnechea, Las Condes, Vitacura y Pudahuel.
  • Provincia Maipo: Calera de Tango, San Bernardo, Buin y Paine.
  • Provincia Melipilla: Curacaví, María Pinto, Melipilla y San Pedro.
  • Provincia Chacabuco: Colina, Tiltil y Lampa.
  • Provincia Talagante: Padre Hurtado, Peñaflor, Talagante, El Monte e Isla de Maipo.
  • Provincia Cordillera: San José de Maipo, Puente Alto y Pirque.
• Región de Los Lagos (26)
  • Provincia Osorno: Osorno, Puerto Octay, Purranque, Puyehue, Río Negro, San Juan de la Costa y San Pablo.
  • Provincia Llanquihue: Calbuco, Cochamó, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Los Muermos, Maullín, Puerto Montt y Puerto Varas.
  • Provincia Chiloé: Ancud, Castro, Chonchi, Curaco de Vélez, Dalcahue, Puqueldón, Queilén, Quellón, Quemchi y Quinchao.

¿Qué implica la escasez hídrica?

Estos decretos permiten que la Dirección General de Aguas (DGA), organismo dependiente de Obras Públicas, autorice las extracciones, por ejemplo, a los Sistemas de Agua Potable Rural (APR) aunque no tengan un título de derecho de aprovechamiento.

También la autoridad podrá intervenir en la distribución de las aguas, suspendiendo las atribuciones de las Juntas de Vigilancia, como asimismo de los seccionamientos de las corrientes naturales dentro de la zona de escasez.

Además, permiten la entrega de recursos de emergencias para quienes viven en zonas rurales como el abastecimiento a través de camiones aljibes.

¿Sequía o escasez?

“En Chile hay sequía y escasez hídrica en algunas zonas. La diferencia es que la sequía es un fenómeno meteorológico, mientras que la escasez hídrica depende de las decisiones que se tomen respecto del uso del agua”, explica el Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR2) de la Universidad de Chile.

“Para determinar si una zona está afectada por escasez hídrica es necesario conocer el funcionamiento de los principales procesos hidrológicos que ocurren a nivel de las cuencas, y cuantificar la oferta y la demanda de agua dulce”, explica en CR2.

Ante este escenario, el centro científico recomienda que además de los criterios usados actualmente, para decretar escasez hídrica en una zona, “la normativa debiera incluir indicadores de uso y demanda. La incorporación de dichos índices permitiría un diagnóstico que facilitaría las decisiones sobre el uso del agua”.