Crisis climática: más de 50 especialistas confirman récord en emisiones de gases efecto invernadero

La información actualizada y el cambio en el enfoque político son las claves para fomentar acciones que eviten superar los 1,5 °C por sobre los niveles preindustriales para el año 2050. Estamos muy cerca de esta cifra y muy lejos del tiempo estimado.

chimeneas industriales emitiendo gases y vapores a la atmósfera
Cada año se han visto incrementadas las emisiones de gases efecto invernadero (GEI), lo que revela las insuficientes acciones climáticas que se han puesto en práctica.

El Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) es la fuente más fidedigna de evidencia científica para llevar a puerto las negociaciones sobre esta cartera. Si bien los datos se actualizan, la frecuencia de los informes del IPCC es cada 5 a 10 años, por lo cual se origina una distancia considerable entre la emisión de cada informe.

No obstante, un estudio publicado en la revista Earth System Science Data, llegó en el momento preciso para el rescate. En la investigación participaron más de 50 especialistas de toda la Tierra, quienes dieron a conocer cifras desconcertantes para nuestra actualidad climática.

Aunque era de esperarse, durante la última década el calentamiento global antropogénico promedió 1,14 °C. Sumado a ello, cada año se bate un nuevo récord en las emisiones de gases efecto invernadero (GEI), llegando a los 54.000 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2).

El presupuesto de carbono restante responde a la pregunta "¿cuánto CO2 se puede emitir para tener una probabilidad superior al 50% de mantener el calentamiento global en 1,5 °C?". De acuerdo a la reciente evidencia, en tres años, este presupuesto se ha reducido a la mitad.

Los especialistas señalan que "este estudio es una llamada de atención", principalmente, respecto a la insuficiencia que se ha visto en las acciones climáticas.

Cabe mencionar que la conferencia climática COP28 se llevará a cabo en los Emiratos Árabes Unidos (EAU) en diciembre de 2023, y en ella se incluirá los detalles de avance que nos permitan mantener el calentamiento global hasta en 1,5 °C para el año 2050.

Conferencia exposición de temas
Mientras más actualizada se encuentre la información de nuestra realidad climática, mejores herramientas tendrán quienes toman las decisiones nacionales e internacionales.

Los especialistas también mencionan que "los formuladores de políticas, los negociadores climáticos y los grupos de la sociedad civil deben tener acceso a evidencia científica sólida y actualizada en la que basar sus decisiones". Para ello, el director del Centro Internacional Priestley para el Clima en la Universidad de Leeds, profesor Forster, coordina la iniciativa Indicadores del Cambio Climático Global, en cuya plataforma podrás encontrar la actualización más relevante de cada año.

Cambio en el enfoque político

"Las tasas de calentamiento a largo plazo se encuentran actualmente en un máximo de las estimadas para este tiempo, causado por los niveles más altos de emisiones de GEI", señala Forster. Agrega "es preciso cambiar la política y los enfoques a la luz de la evidencia más reciente sobre el estado del sistema climático".

De acuerdo con el "mecanismo de trinquete" de ambición creciente previsto por el Acuerdo de París, necesitamos información científica sobre emisiones, concentración y temperatura con la mayor frecuencia posible para mantener actualizadas las negociaciones climáticas internacionales y poder ajustar, si es necesario, políticas nacionales correctas, señaló la Dra. Maisa Rojas, Ministra de Medio Ambiente (MMA) de Chile y autora IPCC.

El documento revela el cambio que han presentado los indicadores clave desde el año 2021. En este sentido, es importante destacar que el calentamiento global antropogénico promedió, durante la reciente década (2013-2022), la cifra de 1,14 °C por sobre los niveles preindustriales. Por lo tanto, el objetivo de calentamiento global antropogénico por debajo de los 1,5 °C debe estar más firme que nunca y respaldado con acciones políticas suficientes y aplicables a las necesidades de cada país.