Agua radioactiva de Fukushima será vertida en el Océano Pacífico

La medida pretende solucionar el acúmulo de agua radioactiva en las instalaciones de la usina nuclear de Fukushima Daiichi, uno de los mayores problemas en el proceso de desmantelamiento de la usina.

Água radioativa de Fukushima será descarregada no Oceano Pacífico
De acuerdo con el Primer Ministro Yoshihide Suga, el agua radioactiva será vertida al Océano Pacífico para solucionar el acúmulo en las instalaciones nucleares de la usina de Fukushima. Imágenes: divulgación/anónimo.

Desde que fue damnificada por el terremoto y maremoto de marzo de 2011, la usina nuclear de Fukushima, en Japón, ha pasado por un largo y difícil proceso de reparos y desmantelamiento. El día 13 de abril, el gobierno japonés decidió que el agua almacenada en la usina sería vertida al océano Pacífico.

Antes de ser vertida, el agua pasará por un tratamiento para retirar gran parte de los elementos radiactivos. La polémica decisión fue criticada por China y Corea del Sur, que lamentaron la resolución del gobierno japonés.

El descarte controlado del agua radioactiva fue la solución escogida por las autoridades japonesas desde comienzos del año pasado, considerándola como la más viable entre una serie de otras opciones complejas. La decisión final fue retrasada debido a la oposición del gobierno de Fukushima y de las asociaciones de pescadores locales, que creen que esto podría perjudicar aún más sus actividades económicas. La pesca fue una de las actividades que más impacto sufrieron luego del accidente nuclear de 2011.

El Primer Ministro de Japón, Yoshihide Suga, tomó la decisión tras una reunión con el Gabinete de Gobierno. La medida fue aprobada por la operadora de la usina -Tokyo Electric Power-, las autoridades locales de Fukushima y también por la Organismo Internacional de Energía Atómica (AIEA), entre otros. Su comunicado fue divulgado durante un encuentro en la emisora estatal NHK.

Las autoridades japonesas defienden que el agua no acarrea ningún riesgo a la salud de las personas, ya que los niveles de material radiactivo que será liberado al mar quedarán por debajo de los límites sanitarios nacionales. Además de esto, la práctica de verter agua radioactiva en el océano es común en la industria nuclear de otros países.

Suga aseveró también que el gobierno hará grandes esfuerzos para esclarecer la preocupación generada por la medida. El plan viene siendo estudiado por especialistas hace más de 6 años, y cuenta con la aprobación de organismos internacionales.

¿Cómo se genera agua radioactiva?

En el caso de la usina Fukushima Daiichi, el agua que será vertida al océano está almacenada en grandes estanques y fue utilizada en el proceso de enfriamiento de los reactores nucleares damnificados. Originalmente, el agua proviene de acuíferos subterráneos y de la lluvia, y tras el proceso de enfriamiento acaba contaminada con isótopos radiactivos.

Las instalaciones de la usina tienen un sistema de tratamiento de agua que remueve una gran parte de los materiales radioactivos considerados peligrosos, con excepción del tritio -un isótopo presente en la naturaleza, aunque en baja concentración.

Actualmente, más de 1,25 millones de toneladas de agua tratada están almacenadas en las instalaciones de la usina. A la velocidad actual con que el líquido es generado, la capacidad de almacenamiento debe acabarse en el otoño del próximo año.

Preocupación con la medida tomada

Koo Yoon-Cheol, director de la oficina de coordinación política sur coreana, lamentó la decisión y pidió transparencia al gobierno japonés con relación al tratamiento y descarte del agua en el océano. "Exigiremos medidas específicas por parte de Japón para certificar la seguridad de nuestra población y prevenir daños al ecosistema marino", dijo Koo Yoon-Cheol.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China también expresó su preocupación con la decisión, mencionando que "el océano es una propiedad compartida de la humanidad". El comunicado también dice que "el vertimiento de aguas residuales nucleares de la usina de Fukushima no es solo asunto nacional (de Japón)".

De acuerdo con el gobierno japonés, el vertimiento de agua tratada al océano será controlado y realizado a lo largo de los próximos dos años.