La Oscilación que ayudaba a la predicción de los huracanes ¡no existe!

¿Qué relación tenía la Oscilación Multidecadal Atlántica con los huracanes? ¿Por qué ya no es válida? ¿Qué dicen los expertos? Descubre las respuestas a estas interrogantes en la siguiente lectura.

Huracán en Océano Atlántico de noche
La Oscilación Multidecadal del Atlántico se utilizaba para la predicción de la temporada de huracanes.

A lo largo de los años, diversas oscilaciones e indicadores han sido establecidas para tener una predicción meteorológica eficiente a largo plazo. Entre estas oscilaciones atmosféricas podemos encontrar El Niño Oscilación Sur (ENOS), la Oscilación Antártica (OAA) y la Oscilación Madden-Julian (OMJ), entre otras. Pero en este artículo nos enfocaremos en una que, hace unos días se dio por inexistente: Oscilación Multidecadal Atlántica (OMA).

¿Para qué se utilizaba la OMA?

Hace unos 20 años, se acuñó el término "Oscilación Multidecadal Atlántica" para lograr describir un ciclo natural relacionado al enfriamiento y calentamiento del Océano Atlántico Norte. La gran importancia de la OMA radica en la explicación de por qué hay ciclos donde se generan más huracanes que otros. La OMA fue descrita por primera vez gracias a Michael E. Mann, profesor de la Universidad Estatal de Pensilvania (UPENN).

Durante la fase cálida de la OMA, existía una alta probabilidad que se presentara una temporada de huracanes más intensa de lo normal. Por su parte, la fase fría de la OMA entregaba luces de una menor actividad de huracanes sobre el Océano Atlántico. Es preciso mencionar que, de acuerdo a los estudios, un ciclo completo de la OMA podía llegar a extenderse por unos 50 a 70 años. Bastante tiempo, si se compara con otras oscilaciones.

Los resultados son contundentes

Hace unos días, toda esta teoría científica fue refutada y, por el mismo Michael E. Mann, en conjunto con su equipo científico. Sus palabras señalan que este hallazgo les lleva a concluir, con una visión más convincente, que el incremento de la actividad de huracanes en el Océano Atlántico están vinculados directamente a la acción humana. Esta investigación descarta que estos fenómenos atmosféricos sean impulsados por condiciones naturales.

Utilizando modelos numéricos, el equipo no encontró evidencias de una causa interna para la OMA. Sin embargo, señalan que las erupciones volcánicas generaron la OMA durante la era preindustrial. No obstante, investigaciones anteriores han demostrado que, sin lugar a dudas, la OMA es un resultado del calentamiento global provocado por la humanidad.

Una visión desde la otra vereda

Michael E. Mann advierte que algunos equipos científicos aplican de mala manera la OMA, minimizando algunos impactos críticos del calentamiento global. Para muchos y muchas investigadores será complejo renunciar a dos décadas de teoría científica. Ya había sido aceptada esta oscilación, por ende, será necesario hacer una reinvención de todo este conocimiento.

Por otra parte, Kevin Trenberth, académico del Centro Nacional de Investigación Atmosférica (NCAR, por sus siglas en inglés), indica que los modelos informáticos no siempre son capaces de simular con mayor precisión la OMA. Advirtiendo que, probablemente, las conclusiones de Michael E. Mann sean algo prematuras. Lo que queda por hacer es continuar fomentando la investigación en el mundo para generar nuevo conocimiento científico en pro de una sociedad actualizada y culturizada.