No es tsunami: mar se retira en Florida antes de la llegada del huracán Ian

Ian es un huracán devastador que roza la categoría 5 y que impactará de lleno en el oeste de Florida, donde el mar se ha retirado en playas y puertos. ¿Por qué ha sucedido esto? ¿Qué es lo que puede pasar en las próximas horas?

Desgraciadamente las previsiones más pesimistas se están cumpliendo, y el devastador huracán Ian se ha intensificado antes de su impacto en Florida (EE. UU.), hasta el punto de rozar la categoría 5, con vientos sostenidos cercanos a los 250 km/h tras avanzar por las aguas cálidas del Golfo de México y producirse un reemplazo de la pared del ojo, algo que sucede en ciclones tropicales particularmente intensos.

En los últimos minutos están llegando imágenes muy impactantes de la retirada del mar en algunas playas y puertos de ciudades situadas en el oeste-suroeste del estado, que recibirá el impacto de un huracán extremadamente peligroso y devastador. Esta retirada de las aguas recuerda a los momentos previos de un tsunami, pero en este caso no es por este motivo.

Este fenómeno puede ocurrir durante huracanes extremadamente poderosos, y de hecho ya sucedió en Florida y Bahamas con Irma en 2017. Ian es tan fuerte y su presión tan baja, que está succionando el agua de su entorno en en su centro. En el centro del mismo, donde la presión es más baja y los vientos convergen, el agua se acumula, volviendo de forma natural con el avance del ciclón tropical.

La marejada ciclónica podría ser catastrófica en muchas zonas del oeste de Florida: alcanzará los 3,5 a 5 metros de Englewood a Bonita Beach. Hay que recordar que es un estado llano y pantanoso, y que cerca de la costa las ciudades se encuentran a una altitud cercana al nivel del mar o algo más. Podría ser una de las mayores catástrofes naturales en la historia reciente del estado.

Las últimas actualizaciones del Centro Nacional de Huracanes no son alentadoras, ya que los vientos sostenidos siguen rondando los 250 km/h, y no se acaba de descartar que pueda alcanzar momentáneamente la categoría 5. El organismo lo define como un huracán catastrófico.

Aunque se debilitará rápidamente al avanzar sobre tierra, dejará lluvias torrenciales y rachas de viento huracanadas en su camino hacia la costa este de Florida durante la madrugada del jueves (hora local de dicho estado). Antes, si se cumplen las previsiones, habrá dejado un rastro de destrucción.

Desgraciadamente, algunas personas no se están tomando en serio las advertencias de autoridades y organismos oficiales, y en los últimos minutos se han visto a bastantes personas meterse en el mar coincidiendo con la llegada de la marejada ciclónica. Estas imprudencias pueden costar la vida. Esperemos que el número de heridos y fallecidos sea el menor posible, aunque en los últimos días las evacuaciones han sido masivas.