James Webb nos muestra los fabulosos anillos de Neptuno como nunca antes
El nuevo telescopio espacial James Webb nos vuelve a sorprender: capturó las mejores imágenes de Neptuno, que muestran de una forma muy nítida sus anillos y siete de sus lunas, ¡cómo nunca antes lo viste!
La NASA publicó recientemente las últimas imágenes capturadas por el nuevo telescopio espacial, y deslumbró a todos. Si pensabas que sólo ibas a poder ver de manera nítida a los anillos del planeta Saturno, estás desactualizado, porque ahora el nuevo telescopio espacial James Web te acerca imágenes espectaculares de los anillos de Neptuno y de algunas de sus lunas también.
La ciencia espacial avanza y telescopio espacial James Webb llegó para permitirnos visualizar todo lo conocido, pero además para ayudar a los científicos a resolver los misterios de nuestro sistema solar, ver más allá de mundos distantes y desconocidos, también alrededor de otras estrellas, explorar las estructuras misteriosas y los orígenes de nuestro universo, y nuestro lugar en él.
Detalles de Neptuno en las imágenes del James Webb
Se ha logrado mostrar con gran nitidez a los anillos del frío y lejano planeta Neptuno, se aprecian varios anillos angostos y brillantes, bandas de polvo tenues y siete de sus catorce lunas.
Webb no solo ha captado la vista más clara de los anillos de este lejano planeta en más de 30 años, sino que además sus cámaras revelan al gigante de hielo desde una perspectiva completamente nueva. Algunos de esos anillos no habían sido detectados desde que Voyager 2 de la NASA se convirtiera en la primera nave espacial en observar a Neptuno en su sobrevuelo de 1989.
La cámara NIRCam de Webb genera imágenes de objetos en el rango del infrarrojo cercano entre 0,6 y 5 micras, por lo que Neptuno no se ve azul a través de los instrumentos de Webb. De hecho, el gas metano absorbe con tanta fuerza la luz roja e infrarroja que el planeta está bastante oscuro en estas longitudes de onda del infrarrojo cercano, excepto donde hay nubes de gran altitud.
Las nubes de hielo de metano se destacan como rayas y manchas brillantes, que reflejan la luz solar antes de que sea absorbida por el gas metano. Imágenes de otros observatorios, incluyendo el telescopio espacial Hubble y el Observatorio WM Keck, han registrado estas características de las nubes en rápida evolución a lo largo de los años.
La NASA explica que la delgada línea de brillo que rodea el ecuador de Neptuno podría ser una señal visual de la circulación atmosférica global, que alimenta los vientos y tormentas de Neptuno. La atmósfera desciende y se calienta en el ecuador, y por lo tanto brilla más en longitudes de onda del infrarrojo que los gases circundantes más fríos.
Pasaron 30 años desde la última vez que vimos estos anillos polvorientos; esta es la primera vez que los vemos en el infrarrojo. La calidad de la imagen extremadamente estable y precisa de Webb permite detectar estos anillos muy tenues que se encuentran muy cerca de Neptuno.
La órbita de 164 años de Neptuno significa que su polo norte está fuera de la vista de los astrónomos, pero sugieren un brillo intrigante en esa área. Un vórtice previamente conocido en el polo sur es evidente en la vista de Webb, pero por primera vez este telescopio ha revelado una banda continua de nubes de alta latitud que lo rodean.
El telescopio detectó a: Galatea, Naiad, Thalasa, Despina, Proteus, Larissa y Tritón, que son siete de las catorce lunas conocidas de Neptuno. Se destaca un punto de luz muy brillante —que no es una estrella; se trata de Tritón, la luna grande e inusual de Neptuno.
Tritón está cubierta de un brillo helado de nitrógeno condensado, por lo que refleja aproximadamente el 70% por ciento de la luz solar que le llega. En la imagen eclipsa a Neptuno, porque la atmósfera del planeta está oscurecida por la absorción de metano en estas longitudes de onda del infrarrojo cercano. Posee una órbita retrógrada inusual, lo que lleva a los astrónomos a especular que esta luna era originalmente un objeto del cinturón de Kuiper que fue capturado gravitacionalmente por Neptuno. Para el año 2023 se tienen programados estudios adicionales con Webb tanto de Tritón como de Neptuno, afirma la NASA.
Fascinación por Neptuno
Fue descubierto en 1846, y desde entonces es un blanco de enorme interés dentro del Sistema Solar para los investigadores. Está 30 veces más lejos del Sol que la Tierra y orbita en la remota y oscura región del sistema solar exterior. A esa distancia extrema, el Sol es tan pequeño y débil que el mediodía en Neptuno es similar a un crepúsculo poco iluminado en la Tierra, afirman los científicos de la NASA.
Este planeta se caracteriza como un gigante de hielo debido a la composición química de su interior. En comparación con los gigantes gaseosos Júpiter y Saturno, Neptuno es mucho más rico en elementos más pesados que el hidrógeno y el helio. Esto es fácilmente evidente en la apariencia azul característica de Neptuno de las imágenes del telescopio espacial Hubble en las longitudes de onda visibles, causadas por pequeñas cantidades de metano gaseoso.