Ciencia y saberes locales se unen para proteger al delfín chileno en Llico
Una investigación pionera en la caleta revela nuevos datos sobre el comportamiento de esta especie única y su vínculo con la comunidad
La bahía de Llico guarda historias que no siempre entran en un cuaderno de campo. Son relatos que se transmiten en los muelles, entre artesanas, buzos y pescadores que miran el mar, como quien revisa un viejo álbum familiar.
Allí, el delfín chileno —conocido como tonina— aparece y desaparece siguiendo ritmos que la comunidad conoce desde antes de que existieran boyas de monitoreo.
Un nuevo estudio chileno decidió detenerse en esas voces y escuchar lo que el territorio ya sabía y contrastarlo con observaciones científicas.
La combinación permitió revelar patrones de movimiento, comportamientos y zonas clave del único cetáceo endémico de Chile, clasificado como “casi amenazado” por la UICN.
Los vigías del mar
Cada mañana, cuando los botes salen a pescar y las recolectoras caminan por la orilla, se pone en marcha un sistema de monitoreo que ninguna tecnología puede replicar. Son los ojos expertos de Llico, quienes sin saberlo llevan años estudiando a la tonina en su hábitat natural.
"Si bien vamos mensual o estacionalmente a hacer terrenos, ellos están siempre allí", recalca Cisternas en un comunicado de la Universidad de Concepción, casa de estudios que colabora en esta investigación.
Además, agrega que los pescadores conocen las rutinas, las zonas de alimentación y los comportamientos que escapan a las visitas esporádicas de la ciencia tradicional.
Mapeando un hábitat esencial
El verdadero tesoro de esta colaboración se revela al superponer el conocimiento local con los datos científicos. El resultado es un mapa preciso que muestra cómo la tonina utiliza su hogar marino.
Uno de los hallazgos más reveladores fue identificar zonas específicas donde los delfines desarrollan comportamientos poco documentados.
Según la investigación, en sectores particulares de la bahía se registraron dos conductas notables: el "bow riding", donde los delfines navegan aprovechando las olas que generan las embarcaciones.
Estas actividades, observadas gracias a la guía de los pescadores, sugieren áreas de socialización y posible comunicación entre las toninas.
La Tonina como patrimonio de Llico
El mayor logro de esta colaboración trasciende los mapas y los informes; reside en la nueva manera en que Llico mira y cuida a su vecino marino.
Camila Calderón, presidenta del CEMM en entrevista con Ladera Sur.
Esta conexión, ahora documentada y validada, es el motor de una nueva forma de custodia. La comunidad ya no solo observa, ahora participa activamente en la protección de lo que siente como propio, sentando las bases para iniciativas futuras de monitoreo comunitario y educación ambiental que nacen desde el territorio.
El delfín chileno, nuestro cetáceo único, ya no navega en el anonimato, desde ahora será custodiado por una red de cuidado tejida con los hilos del saber local y la rigurosidad de la ciencia, asegurando que su silueta continúe surcando estas olas por generaciones.
Referencias de la noticia
Repositorio UdeC. (2025). Aportes a la conservación del delfín chileno (Cephalorhynchus eutropia) desde la co-producción del conocimiento en Caleta Llico, Biobío. Publicado en la web de la institución.
Jeannette Valenzuela Mella. (2025). Único cetáceo endémico de Chile: estudiantes UdeC lideran investigación sobre población local de delfín chileno. Nota publicada en Noticias UdeC.
Lasera Sur. (2025). Inédita investigación en Caleta Llico une ciencia y comunidad para la conservación del delfín chileno. Publicado en la web del medio digital.