¿Cuántas fallas sísmicas hay en Chile y dónde se ubican?

Están en gran parte del país y algunas no se ven a simple vista, pero muchas tiene el potencial de generar grandes sismos. A diferencia de los causados por la subducción de placas, su cercanía a la superficie los puede hacer más destructivos.

Una falla puede extenderse por cientos de kilómetros.
Una falla puede extenderse por cientos de kilómetros.

La falla de San Ramón, en la Región Metropolitana, es por lejos la más conocida de Chile. Recorre ocho comunas de la capital, que concentran más de 1,6 millones de habitantes, y tiene el potencial de generar un terremoto de magnitud 7,5. Es una falla activa, pero el último gran sismo lo habría provocado hace más de ocho mil años y no hay pistas de cuándo podría provocar otro.

Por su ubicación al borde de la convergencia entre dos placas terrestres (la placa Sudamericana y la de Nazca) no solo los sismos de subducción son comunes en el país, sino también las fallas geológicas, rupturas o fracturas en la corteza terrestre que producen una discontinuidad entre bloques de roca.

Las fallas geológicas de mayor envergadura están en los límites de las placas, pero las fallas corticales, que ocurren al interior de placa Sudamericana, son más cercanas a la superficie y, por lo tanto, tienen un alto potencial de destrucción local.

En 2021, el Núcleo Milenio Cyclo publicó el primer catastro que detectó 959 fallas geológicas continentales con posible potencial sísmico a nivel nacional. La investigación detalla que 78 de estas fallas han sido probadas, 592 probables y 288 posibles, cuya ubicación puede visualizarse en un el sitio web de Fallas Activas.

El programa de Geociencias de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Católica, también tiene una herramienta para conocer más sobre las fallas que recorren el país. En su sitio de Fallas de Chile, aún en construcción, se pueden encontrar datos de 25 fallas y sistemas de fallas registrados.

¿Cuál es la falla de mayor actividad en Chile?

Es difícil monitorear cada una de las fallas que recorren el país para determinar cuál es la más activa. Sí hay información sobre los últimos grandes sismos provocados por fallas registrados, entre ellos, Las Melosas en 1958, Aysén en 2007 y Pichilemu en 2010.

Terremotos por fallas corticales con magnitudes entre 6 y 7. En general, son más cercanos a la superficie y, por lo tanto, a centros poblados. Imagen: Fallas Activas - Cyclo.
Terremotos por fallas corticales con magnitudes entre 6 y 7. En general, son más cercanos a la superficie y, por lo tanto, a centros poblados. Imagen: Fallas Activas - Cyclo.


El primero fue, en realidad, una serie de tres sismos en seis minutos, de los que el mayor llegó a una magnitud 7. El fenómeno, que afectó el sector de Las Melosas, en el Cajón del Maipo, tuvo actividad precursora cinco semanas antes.

En el caso del terremoto de Aysén, el movimiento alcanzó una magnitud de 6,2 y lo siguió un tsunami con olas de más de seis metros. De acuerdo a un estudio publicado en 2020 por investigadores de la Universidad de Chile, la activación de tres fallas del Sistema Liquiñe-Ofqui –Punta Cola, Quitralco y Río Cuervo– fue la responsable del movimiento en el fiordo.

La falla de Pichilemu, en tanto, se rompió post terremoto de 2010, impulsada por el movimiento principal. Esta en particular, fue la que provocó un sismo de magnitud 7, que se produjo en pleno cambio de mando presidencial. Se trata de una falla “ciega”, que no tiene evidencia superficial, por lo tanto, era desconocida hasta el momento en que detonó el sismo.

De acuerdo al Núcleo Cyclo, entre Concepción y Valparaíso, hay al menos otras 10 fallas del mismo tipo que podrían activarse durante un próximo terremoto. Las más peligrosas y probables de activarse serían las de Valparaíso, segmento donde existe una laguna sísmica desde el año 1730.

Las últimas fallas descubiertas

La investigación constante sobre las fallas geológicas en el país ha llevado al descubrimiento de nuevas rupturas. Estos hallazgos son esenciales para comprender mejor la actividad tectónica y la dinámica de la corteza terrestre.

Los terremotos corticales tienen la capacidad de producir gran destrucción, pero a escala local.
Los terremotos corticales tienen la capacidad de producir gran destrucción, pero a escala local.

En 2020, el núcleo Milenio Cyclo dio cuenta de una nueva falla activa en la localidad de El Yolki, al sur de Constitución, en la Región del Maule, que tiene la particularidad de no ser visible en la superficie, y que fue descubierta a través del mapeo aéreo con láser (LIDAR).

El año anterior, el mismo grupo identificó otra falla en la localidad de Mesamávida, entre Longaví y Linares, Región del Maule, y una en la localidad de Cariño Botado, en la comuna de Los Andes, Región de Valparaíso. Ambas fracturas son similares a la falla de San Ramón.

Referencias de la noticia: Núcleo Milenio Cyclo, Fallas de Chile, Universidad de Chile.