Día Internacional de la Tierra: restaurar ecosistemas desde la ciencia

Cuando este 22 de abril se desarrollan múltiples iniciativas para la concientización en la necesidad de un cambio en la relación entre los habitantes de nuestro planeta y sus ecosistemas, desde la Organización de las Naciones Unidas se reitera el llamado a abordar, de manera urgente y con participación colectiva, la emergencia climática, de contaminación y de degradación de la biodiversidad, que están poniendo en serio riesgo la supervivencia humana.

El Decenio de la ONU para la Restauración de los Ecosistemas declarado en 2019 por la Asamblea General de la ONU mediante su Resolución 73/284, se extiende entre 2021 y 2030, y según expertos de varias disciplinas relacionadas con las ciencias de la Tierra, es la última oportunidad para la prevención de un cambio climático catastrófico.

Este programa, desarrollado con la participación de varios organismos del Sistema de las Naciones Unidas, fundaciones e instituciones académicas, tiene como objetivo prevenir, detener y revertir la degradación de los ecosistemas en todos los continentes y océanos del mundo. Fomentar la voluntad política de los gobiernos locales y la movilización de recursos para la investigación y la implementación de iniciativas sustentables, es eje fundamental de los esfuerzos que se potenciarán desde la ONU en esta década decisiva.

¿Qué se está haciendo?

Numerosos son los proyectos que se están desarrollando como parte de la implementación del Decenio. Uno de ellos es el proyecto Seegrass en Reino Unido, que con la aplicación de tecnologías avanzadas evalúa y planifica plantaciones de pasto marino a gran escala en el norte de Gales. Conocer el comportamiento del pasto marino en una región puede revelar la ocurrencia de prácticas destructivas como la pesca excesiva y la contaminación del agua, para oportunamente trazar estrategias para revertirlas.

Otro de los proyectos es Acción Andina, enfocado en proteger y restaurar los ecosistemas a todo lo largo de la Cordillera de Los Andes. Es el primer proyecto multinacional en la región que tiene como meta proteger 500 mil hectáreas de bosques primarios poblados con Polylepis, un género de árboles y arbustos endémicos que crecen en altitudes cercanas a los 5 mil metros sobre el nivel del mar. También la restauración de los bosques andinos para la resiliencia climática forma parte de la estrategia a mediano y largo plazo de los cinco países (Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador y Perú) que forman parte de Acción Andina.

Una plataforma virtual: colaborar por el futuro

Presentada en octubre de 2020 como resultado de la colaboración entre Google y el Crowther Lab de la Universidad Pública de Zürich, Suiza, esta plataforma de acceso abierto, pone a disposición de todos los interesados, datos científicos y políticas de implementación de los diferentes proyectos de conservación y restauración en el mundo.

Más de 10 mil fuentes de información compartidas por sus creadores, además de otras 97 mil con acceso aún restringido, permiten al usuario “viajar” a cualquier punto de la geografía mundial, y a través de imágenes satelitales, datos factuales y enlaces a publicaciones, conocer las experiencias de un determinado proyecto. Por su notable impacto en el conocimiento colectivo, esta plataforma ha sido declarada como socio oficial del Decenio de la ONU para la Restauración de los Ecosistemas.

Restor, cuyo objetivo fundacional fue la democratización de los datos ecológicos y elevar su fiabilidad con los conocimientos locales, cuenta con la participación de numerosos científicos de prestigiosas universidades de todo el mundo, y abre un infinito espacio de colaboración para todo aquel que se sienta comprometido con el futuro de nuestro planeta.

Este Día Internacional de la Madre Tierra puede ser el primero en el que desde tu acción individual puedas cambiar actitudes de consumo y comportamientos irresponsables en tu comunidad, que están poniendo en riesgo la habitabilidad de la Tierra. No es alarmismo, pero 10 años es muy poco para tanto por hacer. ¡Manos a la obra!