¿Nieve en Chillán? Inusual fenómeno cubre de blanco la ciudad

Pues sí, ¡todo un evento! En la zona cordillerana del Ñuble no es extraño presenciar nevadas por la influencia de algún sistema meteorológico con aporte de precipitaciones. Pero aquí hablamos de algo distinto: esta mañana (01), en sectores de la comuna de Chillán cayó algo similar a la nieve.

Bajo la influencia de un manto de nubes estratocúmulos, con una temperatura mínima registrada de casi -7 °C y con una humedad relativa de 97,5 %, fue como amaneció hoy Chillán. Lo que llamó la atención y llevó a postear de inmediato a personas de distintos sectores fue una precipitación muy fina y helada, cubriendo las calles como manto de nieve.

Existen diferentes hipótesis en torno a este fenómeno: puede deberse a la niebla y presencia de estratos, a las bajas temperaturas o incluso a la contaminación. Los especialistas debaten aún el motivo de su ocurrencia.

Durante estos días se han reportado otros casos de temperaturas mínimas bajo lo normal: ayer, por ejemplo, fue de -5,5 °C. Estos eventos de frío se deben a la fuerte influencia de una alta fría migratoria que ya se está debilitando. Pero hoy en la mañana se sumaron varios factores que llevaron a que se diera llovizna que se transformó en cinarra. ¿En qué se diferencian ambas?

Llovizna, llovizna engelante y cinarra

"Precipitación bastante uniforme compuesta de gotas de agua finas, muy próximas unas a otras, que cae de las nubes", así define la Organización Meteorológica Mundial (OMM) a la llovizna. El tamaño de gota de llovizna es mucho menor a la de lluvia: suele tener un diámetro menor a 0,5 mm. Cuando caen, parecen flotar por su poco peso y hacen notar los movimientos del aire. Este tipo de precipitación procede de las nubes estratos.

Hay otro tipo de llovizna, que se produce cuando la temperatura de las gotas está por debajo de los 0 °C: la llovizna engelante o subfundida, que al entrar en contacto con la superficie se puede congelar sobre los objetos que toca.

En un caso particular, los estratos pueden aportar una precipitación parecida a la llovizna pero congelada. ¿Has escuchado hablar de la cinarra? La OMM nos explica que es una precipitación que se produce a temperaturas entre 0°C y -10 °C aproximadamente y que, a diferencia de las partículas más grandes, los gránulos no rebotan al golpear el suelo duro.

Pero hay algo más: existe un fenómeno producido por la acción humana que también puede dar una precipitación congelada. La "nieve industrial" nace de la contaminación durante eventos como el ocurrido: el anticiclón, las temperaturas bajo cero y la niebla pueden dar esta extraña nevada, producto a la presencia de partículas contaminante suspendidas en el aire. Y en Chillán hay registros de altos niveles de concentración de material particulado.

Entonces, pudo haber sido nieve industrial porque no sale de la nube, sino que se forma en la baja troposfera. ¿O acaso fue cinarra, una llovizna congelada que dio este paisaje blanquecino? Lo cierto es que, muy probablemente, no fue nieve.