Tecnología militar para detectar riesgos y prevenir golpes de calor en quienes trabajan al aire libre
Un sensor portátil podría alertar sobre peligros latentes causados por el calor, como la deshidratación, calambres o accidentes cerebrovasculares.

El calor es una de las formas más peligrosas de tiempo extremo, porque los síntomas que causa pueden desarrollarse lentamente, lo que retrasa reconocerlos hasta que ocurre algo grave.
Teniendo en cuenta que las olas de calor están aumentando en el mundo, evitar que quienes trabajan al aire libre sufran golpes, agotamiento o calambres por calor tiene a los científicos probando tecnologías que puedan alertar ante un potencial peligro.
El ejército de EE.UU. es uno de los interesados en encontrar una tecnología que permita alertar a sus soldados cuando existen condiciones exteriores peligrosas. Por ello, su Instituto de Investigación de Medicina Ambiental (USARIEM) ha desarrollado el sistema HIPS (Heat Illness Prevention System o Sistema de prevención de enfermedades causadas por el calor) diseñados para prevenir lesiones por calor.
Estimación a partir de los latidos
El sistema HIPS se basa en un algoritmo para estimar la temperatura corporal a partir de la frecuencia cardíaca, la que mide minuto a minuto. Se compone de tres partes principales: un sensor, el algoritmo y las aplicaciones de visualización en tiempo real.
El sensor que se coloca en el pecho contra la piel, similar a los sistemas de entrenamiento comerciales. Se diferencia de estos por la tecnología que incorpora, algoritmos que identifican el calor que alcanza una persona y su riesgo de sufrir una enfermedad por calor.

Finalmente, la aplicación móvil rastrea con precisión el riesgo de calor de un individuo o incluso una compañía completa, considerando que es un dispositivo creado para ser aplicado en instancias militares. Al vincular el dispositivo con geolocalización, los líderes pueden ver tanto la ubicación como el riesgo de calor de sus unidades.
“Nuestro sistema nos ha permitido alertar sobre una enfermedad causada por el calor antes de que ocurra y poder actuar antes de que alguien se caiga y sufra una lesión grave por calor”, afirmó Mark Buller, investigador principal de la División de Medicina Térmica y de Montaña del USARIEM (TMMD, siglas en inglés), en un comunicado.
Del ejército al público general
El sistema del ejército estadounidense se ha desarrollado continuamente desde 2018 y se ha probado en cerca de 14.000 entrenamientos de alto riesgo. Su objetivo es poder alertar con precisión cuando un individuo podría experimentar una enfermedad por calor en los próximos diez minutos.

"El algoritmo de temperatura corporal central del ejército es el más avanzado hasta la fecha y se está integrando en productos para el público en general", dijo Zachary Schlader, profesor asociado de la Universidad de Iowa Bloomington a National Geographic.
El USARIEM está abierto a recibir solicitudes para uso académico, personal e incluso comercial. En su página web se puede acceder a una versión del algoritmo en una aplicación JavaScript, que permite a los usuarios probarlo con sus propios datos.
“Demostramos que, utilizando este índice de tensión térmica podemos identificar todas las enfermedades relacionadas con el calor. Esta es la primera vez que se valida un índice de tensión térmica con casos reales de calor, lo que nos permite confiar en un sistema de monitoreo como HIPS”, afirmó Emma Atkinson, investigadora del TMMD.
Referencias de la noticia:
- Nota de prensa USARIEM. Life-saving technology may help prevent deadly heat injuries for troops – 'This is the future'.
- Versión de algoritmo HIPS en web.
- Artículo en National Geographic. When is it too dangerous to be outside? New wearable tech could tell you.
- Artículo en Physiological Mesurement. Estimation of human core temperature from sequential heart rate observations.