¿Están en peligro nuestras playas?

Las líneas de costa a nivel mundial están en retroceso debido a los efectos conjuntos del cambio climático y la actividad humana que se desarrolla en las zonas costeras. Y Chile no es una excepción.

Evolución de la línea de costa en Playa Las Salinas
Evolución de la línea de costa en Playa Las Salinas para el período 1986-2018. Se muestran también fotografías de 1930 y luego de la marejada del 8 de agosto de 2015. Fuente: Centro de Cambio Global UC (CCG)

El retroceso de las playas es un problema que lleva décadas de desarrollo a nivel internacional, donde se han aplicado distintas metodologías para evitarlo, desde soluciones duras como son la construcción de espigones o diques, hasta soluciones blandas como la realimentacion de playas con arenas propias o de procedencia externa al sistema.

Las causas de estos retrocesos son varias, dependiendo tanto de la zona geográfica, como de la configuación del fondo marino en las proximidades de la playa, de las condiciones del oleaje que impactan en ellas o incluso de la acción o intevención humana a través de modificaciones estructurales en los sistemas para construir espacios recreacionales o habitacionales. Y sin duda, los efectos de aumento de eventos climaticos extremos y el alza del nivel de mar debidos al cambio climático ayudan a incrementar los posibles impactos en las costas.

Situación en Chile

En Chile no se habían publicado estudios sobre erosión costera, hasta que en 2018 apareció el primer trabajo científico publicado por un grupo de investigadores pertenecientes a 3 universidades chilenas donde, no sólo se evidencia la erosión de varias playas del litoral central, sino que se pone en conocimiento que los oleajes que impactan nuestras costas están cambiando, tornándose más intensos los valores extremos con la consecuencia del aumento del número de marejadas de 5 en el 1960 hasta más de 25 en el año 2015.

Erosión en Caleta Portales
Escarpe de erosión de Caleta Portales durante marejada de agosto de 2015

La proliferación del número de marejadas hace que estas sean más seguidas y los sistemas costeros, al perder arena en una tormenta, no son capaces de recuperarse de manera natural antes de la llegada de la siguiente marejada. El efecto conjunto de impacto contínuo de marejadas puede provocar la pérdida definitiva del sedimento sin posible recuperación natural.

Pasado y futuro de nuestras playas

Según un estudio realizado por el Ministerio de Medio Ambiente llamado "Determinación del RIESGO de los IMPACTOS del CAMBIO CLIMÁTICO en las costas de Chile", en el que han participado 4 universidades (Universidad de Valparaíso, la Universidad de Playa Ancha, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y la Universidad Católica del Maule) y 2 centros de investigación (Centro de Cambio Global UC (CCG) y el Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres (CIGIDEN)), la tendencia histórica ha sido de pérdida de arena en el 80% de las playas estudiadas de un total de 35 playas en las regiones de Antofagasta, Coquimbo, Valparaíso, O’Higgins y Biobío.

A esto se suman las proyecciones futuras que indican una tendencia al alza del nivel del mar, donde las playas ubicadas entre Arica y el Canal Chacao tenderán a retroceder entre 3 y 23 m por efecto del cambios en el oleaje y nivel del mar en el escenario de cambio climático RCP 8.5 en el período 2026-2045. Este estudio además es coincidente con el publicado por la revista Nature Climate Change que asegura que la mitad de las playas de arena del mundo tendrán retrocesos significativos al final del presente siglo como resultado de los efectos del cambio climático.