¿Qué tan lluvioso ha sido el invierno hasta ahora en Chile central?
Con agosto, siendo el último mes restante de este invierno 2025, las lluvias en la zona central parecen estar llegando demasiado tarde. O al menos esa es la sensación.

En este artículo, revisaremos los montos de precipitación acumulada en Santiago en los meses de junio y julio, con el objetivo de compararlos con años previos, antes y después de la Megasequía; este periodo extremadamente seco en Chile a partir del año 2010, más o menos.
Junio y julio al debe
En las siguientes figuras vemos la precipitación acumulada en Santiago para los meses de junio y julio a lo largo de los años, desde 1961 en adelante. El año 2025 está destacado con un círculo rojo y el periodo de Megasequía está destacado en color naranja.
En líneas horizontales están marcados el promedio para el periodo 1961-2009 en gris (un periodo pre-Megasequía) y para el periodo de Megasequía en naranja. Es evidente que en ambos meses el promedio de lluvia es menor que para el periodo previo.

El mes de junio de 2025 en Santiago estuvo ligeramente por debajo del promedio climatológico previo a la Megasequía. Un valor acumulado bastante similar a lo observado en 2014 y 2017, pero bastante por debajo de lo observado en 2024.
Si consideramos el promedio de la Megasequía, el año 2025 estuvo por encima. Y muy por encima de años extremadamente secos como 2015, 2021 y 2022. Esto entonces indicaría que junio de 2025 sí fue un mes con déficit en Santiago, pero no un déficit demasiado grande si se considera como referencia a la Megasequía.
Cabe destacar que en el registro histórico, hay años con un junio mucho más seco. Es cosas de mirar esos años en que prácticamente no llovió en junio, como 1975, 1979, 1990 o 2001.

El caso de julio es distinto. Julio es un mes muy afectado por la Megasequía. Durante ella, no hay ningún año en que durante julio haya llovido por encima de ese periodo climatológico pre-Megasequía.
Junio de 2025 estuvo por debajo de ambos promedios. Entrando en un grupo de años en que julio ha tenido un déficit muy grande, como 2024, 2021, 2012, 2013 o lo más lejano 1998 (durante una intensa La Niña), 1987, entre otros.
Un evento puede cambiarlo todo
Con lo llovido en junio y julio, los déficits a lo largo de Chile eran bastante grandes, sobre todo en la zona central. En La Serena, por ejemplo, el déficit era de un 54%, en Valparaíso de un 44% y en Santo Domingo de un 58%. En Santiago, a pesar de lo poco que había llovido durante julio, el déficit era solo de un 30%.
Pero después de esto vino el comienzo de agosto que trajo consigo un evento de lluvias bastante importante. Este evento provocó que los déficits registrados cambiaran radicalmente en la zona central.
En La Serena, tras el evento de lluvia, no hay déficit, quedó en 0%, en Valparaíso pasamos a tener un pequeño superávit del 3%. De manera similar, en Santo Domingo, donde había un déficit bastante importante, se redujo hasta un 28%.

En Santiago también se redujo el déficit, pasando de ese mencionado 30% a solo un 9% en la estación Quinta Normal. Un cambio similar se registró en Pudahuel, que pasó de tener un 26% de déficit a solo un 2%.
Esto viene a evidenciar que cada evento de precipitación cuenta, y bastante. La lluvia en Chile central tiene un carácter esporádico y son pocos los días de precipitación, incluso en invierno, por lo que un evento grande de lluvias puede hacer que todo el invierno tenga valores normales o incluso lluviosos.