¡Asombroso! La ciencia revela por fin por qué ronronean los gatos domésticos

¿Se ha resuelto por fin el misterio del ronroneo de los gatos? Los científicos afirman tener la explicación definitiva: ¡nuestros felinos domésticos tienen "almohadillas" integradas en sus cuerdas vocales!

Gato acariciando ronroneando
El ronroneo de los gatos ha sido durante mucho tiempo un misterio para la ciencia: estas vocalizaciones de baja frecuencia sólo suelen observarse en animales mucho más grandes, como los elefantes.

¿Por qué ronronean nuestros gatos domésticos? Es esta pregunta sorprendente y hasta ahora sin respuesta la que la ciencia ha decidido abordar. Y los investigadores han planteado una hipótesis inédita, en un estudio publicado el 3 de octubre en la revista Current Biology.

¡“Almohadillas” en las cuerdas vocales!

Así que el ronroneo de nuestros gatos domésticos era un misterio que pronto se resolvió. Este tipo de vocalizaciones de baja frecuencia (entre 20 y 30 hercios) son sorprendentes, porque suelen observarse en animales mucho más grandes, como los elefantes, que además tienen cuerdas vocales mucho más largas que los gatos.

Entonces, ¿cómo pueden los gatos hacer vibrar sus cuerdas vocales a frecuencias tan bajas? Sencillamente porque tienen una especie de “almohadillas” (similares a las de abajo de las patas) integradas en sus cuerdas vocales, según estos científicos. Este tipo de tejido graso en su laringe les permite ronronear, por ejemplo cuando los acariciamos.

¿Cómo se les ocurrió esta hipótesis? Simplemente estudiando la laringe de 8 gatos domésticos que murieron tras una enfermedad incurable (ningún animal fue maltratado durante el experimento). Al apretar sus cuerdas vocales haciendo pasar un chorro de aire caliente y húmedo a través de ellas, todos los gatos emitieron un sonido de ronroneo, sin ninguna contracción muscular ni aporte neuronal.

Sorpresa: ¡el cerebro no juega ningún papel!

Sin embargo, cuando el gato está vivo, puede aumentar muscular o intencionadamente la intensidad y potencia de este ronroneo. Pero esto demuestra que el cerebro no interviene necesariamente en la aparición del ronroneo, lo que supone "una gran sorpresa" para los investigadores.

Las almohadillas, una especie de masas de tejido fibroso hasta ahora desconocidas, aumentan la densidad de las cuerdas vocales, lo que las hace vibrar más lentamente: de ahí estos sonidos de baja frecuencia, a pesar del pequeño tamaño de los gatos en comparación con otros animales.

Resultados que, sin embargo, aún deben ser confirmados con experimentos con gatos vivos, obviamente más controvertidos... Además, aún quedan otros misterios por dilucidar: ¿cómo y por qué se produce el ronroneo si el cerebro no es responsable de él? ¿Es un mecanismo calmante, una señal de satisfacción o incluso de afecto? Asunto a seguir…