¿Cómo se sienten los chilenos con su salud? Informe revela luces, sombras y urgencias

    Estudio global de Ipsos muestra un país atento a su bienestar, preocupado por su acceso a la atención y más dispuesto a hablar de salud mental que hace una década.

    Salud
    Los datos muestran una población consciente de los desafíos en salud, pero que encuentra obstáculos en el acceso a una atención de calidad.

    En Chile, la salud dejó de ser un tema reservado para consultas médicas y empezó a colarse en conversaciones cotidianas: en la pausa del café, en la micro, en reuniones de trabajo.

    El nuevo Informe de Servicios de Salud 2025 de Ipsos confirma esa intuición. La ciudadanía no solo observa su propio bienestar, también se pregunta qué tan preparado está el país para acompañarla.

    Lo interesante es que este retrato no se queda únicamente en diagnósticos complejos: también muestra una sociedad que identifica sus prioridades, habla más abiertamente de salud mental y expresa un interés creciente por entender cómo sus decisiones —alimentación, actividad física, acceso a medicamentos— se conectan con el sistema de salud.

    Salud mental: una conversación que dejó de ser silenciosa

    La salud mental se instaló como el primer tema en Chile, mencionada por el 68% de las personas encuestadas, el registro más alto entre los 30 países analizados.

    Pero más que un síntoma de crisis, esta cifra también revela algo más profundo. La gente está hablando, está pidiendo ayuda y está visibilizando problemas que antes se escondían.

    Este dato resuena con otro que tensiona el panorama: el 59% de las personas en 30 países afirma haber vivido momentos de estrés extremo en el último año, según Ipsos, mientras la OMS advierte que los trastornos depresivos y de ansiedad aumentaron un 25% tras la pandemia.

    En Chile, además, un 28% declara haber tomado medicamentos para mejorar su salud mental, un porcentaje muy por encima del promedio global.

    Las conversaciones sobre bienestar emocional no solo se han ampliado, están cambiando hábitos, consultas y decisiones cotidianas.

    Tiempos de espera largos y expectativas contenidas

    Si hay un punto que une a la mayoría de los chilenos, es la sensación de que llegar a una atención oportuna puede tomar demasiado tiempo. El 60% identifica este como el principal problema en el sistema sanitario del país.

    Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Chile se ubica entre los países con una mayor presión sobre su fuerza laboral sanitaria y una de las brechas más profundas en el acceso a médicos especialistas en comparación con el promedio de la organización.

    Acceso a salud
    El informe de Ipsos refleja una ciudadanía que valora la calidad de la atención cuando finalmente la recibe, pero que siente que el “camino” para llegar a ella es el verdadero obstáculo.

    La experiencia cotidiana lo confirma: horas médicas agendadas para meses después, emergencias colapsadas y diferencias marcadas entre la salud pública y privada.

    Los datos revelan una mezcla entre satisfacción con el servicio y frustración con el acceso, que configura un gran desafío para las políticas públicas.

    Mucha conversación en redes, poco conocimiento real

    Aunque México lidera la preocupación global por la obesidad (58%), Chile aparece muy cerca. El 44% de la población considera este un problema sanitario prioritario, casi el doble del promedio mundial (25%).

    La alerta está instalada, pero la información disponible para la ciudadanía aún no acompaña este nivel de preocupación.

    Ese contraste se hace evidente con los medicamentos GLP-1 —como Ozempic o Mounjaro—, que han transformado el tratamiento de la obesidad en varios países. En Chile, sin embargo, solo el 24% ha oído hablar de ellos, cifra muy distante del 74% registrado en Estados Unidos.

    La conversación existe, pero la mayoría la sigue desde lejos. La vía de entrada a este tema tampoco es la consulta médica.

    A nivel global, el 45% de quienes conocen los GLP-1 los descubrió en redes sociales, ya sea por videos en TikTok, publicaciones en Instagram o debates en YouTube. Apenas un 19% recibió esta información desde un profesional de la salud.

    La sociedad chilena ha diagnosticado con claridad los problemas de su sistema de salud. El reto ahora es convertir esa lucidez colectiva en respuestas efectivas que alivien tanto la mente como el cuerpo.

    Referencias de la noticia

    - IPSOS. (2025). INFORME DE SERVICIOS DE SALUD DE IPSOS 2025: Encuesta Ipsos Global Advisor en 30 países. Documento publicado en la web de la institución.

    - IPSOS. (2025). El conocimiento sobre los GLP-1 es bajo a nivel mundial, pero alto en las economías más avanzadas. Comunicado publicado en la web de la institución.

    - WHO. (2022). COVID-19 pandemic triggers 25% increase in prevalence of anxiety and depression worldwide. Nota publicada en la web de la organización.

    - OCDE. (2025). Panorama de la salud 2025. Documento publicado en la web de la institución.