Y después de El Niño ¿vendrá un evento La Niña o una condición de neutralidad?

Después de un evento El Niño intenso suele venir uno o dos años La Niña. ¿Será que eso es lo que ocurrirá en 2024 cuando termine el actual evento El Niño?

Temperatura superficial del mar
Anomalías de temperatura superficial del mar del día 30 de noviembre. Datos NOAA Coral Reef Watch.

El actual fenómeno de El Niño se encuentra en uno de sus momentos más intensos en el Pacífico ecuatorial central. Las anomalías de temperatura superficial del mar, TSM (o SST, en inglés) superan los 2°C en la zona El Niño 3.4. Esto significa que el actual evento El Niño va en vías de ser catalogado como un evento intenso, tal y como fue pronosticado por los modelos de pronóstico hace ya varios meses.

El actual evento de El Niño alcanzó la categoría de intenso, tal cual como los pronósticos oceánicos y climáticos indicaban que sería.

Recordemos que la intensidad de los eventos El Niño (o La Niña) se mide por las anomalías trimestrales y no por las anomalías diarias. No obstante estos altos valores de temperatura diaria nos dan a entender que el evento está en condiciones saludables e intensificándose.

Cuando un Niño intenso termina

Los eventos El Niño implican en el calentamiento del Pacífico ecuatorial mientras que los eventos La Niña corresponden a un enfriamiento. Sin embargo, esta relación cálido y frío no es simétrica. En general, los eventos El Niño son más intensos que los eventos La Niña y, a su vez, los eventos La Niña suelen ser más duraderos que los eventos El Niño.

Y hay una relación física detrás de esta asimetría. El calor extra provocado por un evento El Niño se tiene que ir a alguna parte (además de a la atmósfera). Este calor extra se empieza a transportar hacia los polos, en un proceso llamado de "carga y descarga" y descrito en este artículo de la Dirección Meteorológica de Chile. Los eventos El Niño, al ser más intensos, provocan anomalías en los vientos alisios más intensas que en los eventos La Niña, por lo que el proceso de descargar el calor extra hacia los polos es menos eficiente durante los eventos La Niña y toma mucho más tiempo.

Indice oceánico El Niño histórico
Indice oceánico El Niño histórico. En rojo anomalías positivas y en azul anomalías negativas. Barras verticales rojas indican periodos El Niño y azules La Niña. Fuente NOAA.

Por esta razón es que después de un evento El Niño intenso comienza rápidamente el proceso de descarga y suele producirse un evento La Niña en el año siguiente, el que incluso puede llegar a durar tres años, tal y como lo vimos con el reciente evento de La Niña triple. Desde que tenemos registros confiables (no reconstrucciones), en tres oportunidades se ha producido el efecto de La Niña triple, pero aún más relevante, es que los pulsos dobles de La Niña son muy comunes y que casi inevitablemente después de un evento El Niño intenso viene un evento La Niña.

Y después de este Niño ¿qué?

Antes de responder a este pregunta es necesario mencionar que el actual evento El Niño aún puede aumentar de intensidad un poco más. Los eventos El Niño suelen ser más intensos durante el verano austral, por lo que es probable que el promedio trimestral de las anomalías de TSM en el Pacífico ecuatorial superen los 2°C de anomalía en el trimestre diciembre-enero-febrero, DEF (o DJF, en inglés).

Después de ese máximo que los modelos pronostican a mediados de enero y febrero de 2024, comienza el decaimiento del evento. Y acá sí entra la pregunta ¿qué viene entonces?

Pronóstico El Niño
Izquierda: Pluma de pronósticos de anomalía de temperatura superficial del mar de distintos modelos climáticos. Fuente IRI y APCC (en inserto). Derecha: Pronóstico de anomalías de temperatura superficial.

Si nos fijamos en la tasa de crecimiento de las anomalías de temperatura entre agosto de 2023 y DJF de 2023-2024 (ver inserto en la figura superior), esta es mucho menos intensa que la tasa de decrecimiento que los modelos pronostican a partir del trimestre FMA. Hacia el trimestre junio-agosto-septiembre (JAS) de 2024 algunos modelos ya indican la posibilidad de valores negativos de anomalías. Un enfriamiento bastante rápido.

Existe cerca de un 60% de probabilidad de que el invierno de 2024 sea Neutro (ausencia de El Niño y la Niña). La probabilidad de un evento La Niña para el próximo invierno aún es baja, alrededor de un 15%, pero basándonos en lo que la historia nos muestra y la tasa de enfriamiento, es probable que esa probabilidad vayan en un rápido aumento hacia finales del año 2024.

Si bien no tenemos todavía pronósticos confiables para finales de 2024 y, por lo tanto, no se puede asegurar que La Niña vaya a volver. Sin embargo, es algo que debemos tener en consideración, sobretodo con los antecedentes que el actual fenómeno de El Niño está aportando.