¡Ojo con este caracol! Alerta en Chile por presencia de una de las especies más dañinas del mundo

Un ejemplar detectado en plantas ornamentales ingresadas ilegalmente a la Región de Tarapacá y una concha traída por turistas que ingresaron a la Región de Arica y Parinacota luego de un viaje familiar a Brasil, llevaron al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) a levantar un alerta fitosanitaria en territorio chileno.

En ambos casos se encontró a Lissachatina fulica, más conocido como caracol gigante africano. Según las autoridades, este molusco identificado como plaga invasora representa una amenaza para la agricultura, el medioambiente y la salud humana.

En entrevista con CNN Chile el ministro de agricultura, Esteban Valenzuela, enfatizó en que “esto tenemos que controlarlo, y es por eso que pedimos y reiteramos que no traigan ninguna verdura, fruta, corteza, porque va afectando a la seguridad del país y cualquier ejemplar que encuentren tienen que avisar al SAG”.

¿Lindo? Sí, pero peligroso

A simple vista puede lucir como un caracol cualquiera. Con su andar lento, una concha vistosa y sacando sus “cachitos” al Sol, cualquiera podría pensar ¿qué tiene de peligroso este animal? Pues, lo es y mucho.

Aunque el ministro Valenzuela explicó que la alerta emitida por el SAG no significa que el molusco es una plaga en Chile, es importante conocer los riesgos de una posible reproducción de esta especie invasora en nuestro país. Las consecuencias se podrían ver principalmente en tres ámbitos:

• Medioambientales, porque podría desplazar a especies de caracoles chilenos debido a su competencia por el mismo hábitat y alimentos, así como provocar la depredación de flora nativa.
  
• Daño a la agricultura, ya que el caracol gigante africano es una especie omnívora —animal que se alimenta de toda clase de sustancias orgánicas, tanto animales como vegetales—, que se caracteriza por su gran apetito, representando una amenaza para los cultivos.
  
• Riesgo para la salud humana, debido a que puede portar varios parásitos, que al infectar a personas, pueden provocar enfermedades como meningitis y encefalitis.

En un comunicado el SAG menciona que los dos ejemplares encontrados en la zona norte fueron sometidos a análisis de laboratorio donde se descartó la presencia de los parásitos que causan enfermedades en las personas. Como información adicional mencionan que estos se transmiten a través de secreciones y baba contaminada del caracol.

¿Cómo identificar a este polizón?

Podríamos definir a este molusco como un “viajero clandestino”, ya que se mueve “pegado” a maletas, autos o material de embalaje —y en el caso de Chile, escondido en plantas ornamentales— o transportado por personas que desconocen su origen y las amenazas que representa.

Por esto, las autoridades han sido enfáticas en comunicar qué características debemos tener en cuenta para reconocer a este molusco y ser responsables en su manejo. Su atractivo resulta llamativo y muchos pueden caer en la tentación de tenerlo como una linda “mascota” para decorar sus jardines.

• La primera característica a considerar es su tamaño, ya que puede llegar a medir hasta 30 cm de largo y 10 cm de ancho cuando alcanza su estado adulto.
  
• Lo segundo y más visible es la forma de su caparazón o concha, que es cónica con un corte en la base de la columna.
  
• Por otro lado, la apertura de su caparazón es filosa al tacto —aunque no se recomienda su manipulación.
  
• Finalmente, el color de su concha es, generalmente, de un tono marrón o café con líneas longitudinales de color castaño claro y oscuro y con forma irregular.

¡Si lo ves no lo manipules y llama al SAG!

La tentación de tomarlo en nuestras manos ya sea por curiosidad o por moverlo de lugar puede ser grande, pero lo que las autoridades recomiendan a la ciudadanía en caso de encontrar un ejemplar es claro ¡No manipularlo y ponerse en contacto de inmediato con el SAG! Para ello se puede llamar al call center 223451100 o bien escribir al correo [email protected].